En Colombres, un coqueto pueblo del concejo de Ribadedeva, el más oriental de Asturias, se encuentra uno de los museos más interesantes de toda la región, el Archivo de Indianos de Colombres.
El Archivo de Indianos de Colombres está ubicado en una impresionante casona azul de cinco plantas y estilo indiano que fue construida en 1906 por Íñigo Noriega Laso (Colombres, 1853 – Ciudad de México, 1920), un joven que emigró a México con tan solo 14 años para labrarse un futuro mejor.
Allí se casó con Guadalupe Castro y se convirtió en un reputado empresario, aunque con un historial bastante controvertido ya que forjó una estrecha relación con el dictador mexicano Porfirio Díaz (1876 – 1910).
Como tantos otros decidió usar parte de su fortuna para construir una casa de veraneo en su pueblo natal, a la que llamaría La Quinta Guadalupe en honor a su mujer (algo muy común por aquel entonces), una preciosa casona indiana rodeada por un jardín repleto de especies como magnolios, tilos, palmeras canarias, cedros, acebos, fresnos, cipreses, etc.
Sin embargo, Íñigo nunca llegó a habitarla, e incluso trató de regalársela a Porfirio Díaz para que se exiliase allí tras la Revolución Mexicana, algo que realmente nunca llegó a hacer ya que prefirió trasladarse a París.
Tampoco Guadalupe llegó a ver terminada la casa a la que le dio nombre. Desafortunadamente murió en 1904, dos años antes de que se consumase su construcción.
De casa de verano a sede de la Fundación Archivo de Indianos
Los primeros años tras la muerte de Íñigo la casona se utilizó como casa de reposo y hospital de sangre, más tarde pasó a ser un Centro de Auxilio Social y desde 1987 alberga la Fundación Archivo de Indianos, una iniciativa común del Principado de Asturias, la ya extinguida Caja Asturias y la Universidad de Oviedo.
No se me habría ocurrido un lugar mejor para ubicar la sede de la fundación, y es que la casa representa a la perfección las características de la arquitectura indiana, la ostentación que se ve reflejada principalmente en los materiales utilizados y en la mezcla de estilos (Art Noveau mezclado con otros más clásicos), muebles de madera tallados, artesonados imposibles, gran cantidad de iconografía y un largo etcétera de elementos representativos.
Colombres fue galardonado en el marco de los Premios Princesa de Asturias con el título de Pueblo Ejemplar de Asturias en el año 2015 precisamente “por haber sabido conservar y enriquecer el legado de los emigrantes asturianos, manteniendo su patrimonio y reivindicando ese pasado que convierte la emigración en un elemento dinamizador de la cultura, la economía y la sociedad”.
Un palacete para transportarnos de vuelta al pasado
La casa es una maravilla tanto por fuera como por dentro ya que está perfectamente conservada.
Tanto los suelos como los techos y las paredes al igual que las diferentes piezas de mobiliario, objetos de la época y documentos que inundan las diferentes estancias de La Quinta Guadalupe se encuentran en perfecto estado.
Además, algunas salas de la casa están reconstruidas y redecoradas como si fueran de la época, lo que lo hace una visita muy dinámica, interesante y entretenida al poder imaginar con facilidad cómo era todo en aquellos tiempos.
Repaso a la historia de la emigración asturiana a América
Dentro de la casona también se puede disfrutar de una exposición muy extensa (pero para nada pesada) sobre la emigración asturiana a América en la que se explica desde por qué tanta gente decidió emigrar hasta cómo fue el regreso de los que volvieron.
Esta exposición está dividida en tres plantas en las que además de los principales destinos de recepción de emigrantes también se habla sobre los diferentes centros asturianos que se establecieron en América:
- Planta baja → Cuba y Tampa (Estados Unidos)
- Primera planta → México, Venezuela e historia de Íñigo Noriega Laso
- Segunda planta → Argentina, Chile y Uruguay
Es una gozada poder disfrutar de algo tan bonito, con tanta historia y con tantísimo significado para tantas y tantas personas que tuvieron que ver como su familia y amigos se subían a un barco en busca de una vida más próspera.
Es emocionante incluso para quienes hemos crecido escuchando historias de familiares a los que nunca hemos llegado a conocer porque hace años tuvieron que embarcarse en una aventura que no tuvo billete de vuelta.
Las razones para partir, voluntarias o forzosas, eran diversas: exilios por cuestiones políticas (sobre todo durante la Guerra Civil pero también antes, durante el siglo XIX), anhelo de una vida mejor, escapar de la pobreza…
“Los emigrantes han transitado por las distintas geografías de América de forma voluntaria o forzosa, todos han vivido infinitas historias individuales que merecería la pena contar, pero que nunca podrán ser contadas. Historias de vida que quedarán, las más de las veces, disueltas, perdidas, esfumadas, pero no del todo, porque al fin y al cabo, a lo largo de más de un siglo, los emigrantes españoles en América, lograron hacer una historia en común que ha quedado inscrita en grandes realizaciones empresariales, presente en la labor solidaria de sus hospitales y proyectada en sus escuelas y otras obras sociales.
Todas esas creaciones hablan para nosotros y para nuestros hijos, en el Museo de la Emigración, de la capacidad de los emprendedores bisabuelos o de los abuelos y abuelas que partieron un día de remotas aldeas, de casas con nombre, solitarias o agrupadas, colgadas de montañas y riscos o las que descansan en los verdes valles de Asturias y de otras tierras de España.”
Texto que apareció en la publicación con motivo del Premio a Pueblo Ejemplar en 2015.
Sin embargo no todas las historias tuvieron final feliz. Hubo quienes volvieron a casa con una mano delante y la otra detrás o quienes pusieron punto y final a sus vidas antes incluso de llegar a destino.
Precisamente eso fue lo que les pasó a las 488 personas que viajaban a bordo del Valbanera, un vapor que partió de España en 1919 y al que se le perdió la pista entre Santiago de Cuba y La Habana por un huracán.
Una zona de la exposición está dedicada a los vapores, con historias tristes y felices y multitud de carteles y fotografías de la época. Para mí fue una de las partes más interesantes de todo el recorrido porque es donde se ve la parte más humana, la realidad más dura y menos idílica de la emigración.
Personalmente, la visita me resultó interesantísima, creo que el Archivo de Indianos de Colombres es uno de los museos más recomendables, completos y mejor conservados de Asturias.
Quizás no lo recomendaría para ir con niños muy pequeños ya que seguramente se aburrirán al haber muchos paneles que leer para entenderlo todo y disfrutarlo al máximo, pero con niños un poco más mayores puede ser interesante para aprender un poco de historia.
Además, se puede complementar con la Ruta de la Huella Indiana de Colombres, un paseo por el pueblo recorriendo los exteriores de las casas de indianos.
Es un plan perfecto tanto si no llueve, para poder recorrer los jardines, como si llueve, ya que la casa es amplia y se pueden dedicar dos horas o un poco más de tiempo tranquilamente a recorrerla en profundidad.
Precio ⇒ Adultos 5 € - Niños 3 €
Horario ⇒ Del 1/10 al 31/5 de lunes a domingo de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 19:00
Del 1/6 al 30/9 de lunes a domingo de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00
Cerrado los días 1/1, 6/1, 25/12 y las tardes de los días 24/12 y 31/12
Más información ⇒ http://www.archivodeindianos.es/ | 985 412 005
18 comentarios
Qué museo más interesante y bonito. Personalmente me encantan las historias de emigrantes. Las venturas y desventuras. En Nueva York siempre recomiendo pararse en Ellis Island cuando se visita la Liberty Island. Ahí era el punto de llegada de los inmigrantes, y ahora es un museo con enseres que dejaron, fotografías, procedencias, qué cribas debían pasar antes de obtener el permiso para acceder a Manhattan, etc.. un verdadero tesoro
El cartel de “Prohibido hablar de política” es la bomba
Sin duda en alguna visita a Asturias iré a visitarlo
Es que estos museos son una maravilla. Es impresionante descubrir las historias que hay detrás de cada emigración… Generalmente todas tristes :(
Magnífico, lo disfruté mucho. Pero entré por equivocación, creo. Me gustaría saber si de veras existe ahí un archivo, estoy buscando a mi abuelo asturiano. Felicidades
Abel
Hola Abel, muchas gracias por tu comentario :) Sí, existe un archivo de indianos asturianos que se fueron a diferentes partes del mundo. Si buscas información concreta te animo a que te pongas en contacto directamente con ellos a ver si te pueden ayudar a encontrar a tu abuelo. Un abrazo fuerte y te deseo mucha suerte!!!
Me encanta, Sandra!! Menuda currada de post!
Me apasiona la Historia, y en concreto la emigración a América es un tema que me fascina.
Tengo muchísimas ganas de ir a Asturias a visitar este archivo y otras casas de indianos, y creo que voy a disfrutarlo mucho.
Gracias por compartir!
Un besazo!
Qué buen post Sandra! Yo hace tiempo que quería haberlo escrito, pero imposible superarlo ni en fotos ni en descripción!! Me quito el sombrero!
Un abrazo
Carmen
Graaaaaacias! Yo llevaba con él en la recámara un año jeje No hay tiempo para hablar de todo lo que uno quiere, desde luego… :( Un besote!
Oye me ha encantado, yo que he estado por el Norte y siempre había visto esas casas de indiano pero como en la lejanía y veo que existe este Archivo de Indianos que me recuerda, aunque con otra dimensión, el que hay en la Isla de Ellis en NY. Me ha encantado la entrada y las fotos te trasladan a ese mundo de los barcos de la emigración, en cierto modo también la Belle Epoque. Me lo apunto para cuando vaya por arriba, saludos viajeros
LoBo BoBo
Merece mucho la pena Paco, creo que es una parte poco conocida de la historia de la zona Cantábrica que sin embargo es interesantísima y podría tener mucho tirón, tanto en el turismo de fuera como en el de dentro de la comunidad. Un abrazo!
Súper interesante! Nos lo apuntamos para incluirlo en nuestro próximo viaje a Asturias. Gracias!
Genial Rachele! Un abrazo.
Muy bonito todo lo que publicas Sandra, y es que Asturias es único, pero con tu buen gusto lo haces aparecer aún mejor. Enhorabuena por tu Blog.
Muchísimas gracias por tus palabras Miguel Ángel, me alegro muchísimo de que te guste lo que publico y cómo se ve Asturias :) Un abrazo!
Es que yo soy hijo de una emigrante allandés a Buenos Aires y de hecho nací allí, como otros muchos asturianos. Mi tío Agustín Allande Álvarez fundó el Centro Asturiano de Buenos Aires y fue uno de sus primeros Presidentes.
A ver si algun dia te pasas por Allande que también es muy bonito y lo publicas. Para que te animes puedes asomarte a mi pagina en Pinterest.
https://www.pinterest.es/agarquitectura/concejo-de-allande-principado-de-asturias-espa%C3%B1a/
Un abrazo!
Miguel Ángel
WOW Miguel Ángel! Qué interesante lo que me cuentas :D En Allande he estado muchas veces pero nunca cámara en mano, así que a ver si vuelvo pronto y le puedo dedicar algún post a esa zona que tanto me gusta… Un abrazo!!!
Estupendo Sandra, anímate, Allande te recibirá con los brazos abiertos. Un abrazo
Muy buen post! Fuimos este verano y nos encantó!! 😉
Es que es una joya… :)