Playa, playa y más playa. Seguro que ese es uno de tus mayores deseos ahora mismo, y para qué te voy a mentir, también es lo que más se repite en mi cabeza estas últimas semanas…
Nuestras pieles blancuchas van necesitando absorber algún rayo de sol para abandonar ese blanco cadavérico y nuestros ánimos van necesitando una renovación a base de pies descalzos, tardes al sol y cervezas entre amigos después de intensas jornadas de playa.
Por eso, hoy he decidido llevarte conmigo a Mallorca, eso sí, mentalmente (más me gustaría a mi poder estar allí ahora mismo), enseñarte mis cinco playas mallorquinas favoritas (más un plus) y decirte por qué creo que se merecen un puesto en mi Top 5, ¿me acompañas?
1. Formentor
No te descubro nada nuevo si te digo que no me gustan los sitios donde hay demasiada gente y más si se supone que son sitios donde pretendes descansar y relajarte, así que siempre huyo de las playas abarrotadas. La simple idea de verme rodeada de hordas de gente hace que muchas veces prefiera cualquier otro plan antes que tener que compartir espacio vital con tantas personas. Y me dirás ‘pues Formentor no es la mejor opción para estar a tus anchas’ y no me queda otra que no darte la razón, eso sí, siempre y cuando vayas al atardecer, justo a la hora a la que los turistas se retiran a cenar.
Durante los días que estuvimos por la zona siempre disfrutamos de los atardeceres en Formentor y así teníamos el privilegio de compartirla sólo con 5 o 6 personas más, lo que viene siendo el momento perfecto para disfrutar de un auténtico paraíso.
· ¿Cuándo?: Al atardecer (19:00 aproximadamente) podrás disfrutar de una playa casi desierta.
2. Cala Barques
Esta pequeña cala nos piyó un poco por sorpresa. Como ya te conté en Mallorca – Diario de Viaje (Parte 1), nos alojamos durante unos días en el hotel Hoposa Niu, en Cala San Vicente, y aunque sabíamos que estaba al borde del mar, no nos imaginábamos que sólo con poner un pie fuera del hotel ya estaríamos en la cristalina Cala Barques y rodeados por la sierra de Tramuntana.
Es una cala de piedra (aunque hay un poco de arena) y pese a que suele haber bastante gente no llega a ser asfixiante (al menos cuando estuvimos nosotros, a principios de Septiembre).
También tiene alquiler de tumbonas y sombrillas y si te cansas, siempre puedes ir a hacerle una visita a la terraza del hotel y tomarte un mojito (que por cierto estaban muy ricos).
Además, al ser bastante cerrada el mar suele estar como un plato (algo que no siempre se cumple en las playas que están en la zona que da a la Tramuntana), lo que la convierte en una cala perfecta para hacer snorkel o incluso ir con niños.
· ¿Cuándo?: Si tuviera que elegir un sólo momento del día sería a primera hora de la mañana, cuando la playa aún está vacía.
3. Sa Calobra / Torrent de Pareis
Sa Calobra es sin duda la playa más peculiar de Mallorca, empezando por la particular carretera hiperserpenteante que da acceso al pueblo de mismo nombre (La culebra en castellano) y siguiendo por el camino excavado en las rocas que nos conducirá hasta el Torrent de Pareis.
Una vez allí se puede contemplar el imponente torrente, con unas paredes de piedra inmensas, seco en los meses de verano pero no durante el resto del año, así que si lo visitáis en cualquier otra estación os recomiendo que tengáis precaución.
El agua, como en la mayoría de las playas de la isla, es azul turquesa muy intensa, un verdadero placer que los del norte sabemos apreciar bien (cada vez que pienso en estas aguas azulonas me viene a la cabeza la playa de Luarca con esos matojos de algas entre las que nos bañábamos de pequeños, ¡puaj! casi igual, ¿verdad?).
· ¿Cuándo?: En primavera y/o verano, a primera hora de la mañana (llegar sobre las 10:30 estaría bien), antes de que llegue la marabunta de turistas.
4. Es Trenc
Es Trenc quizás sea la playa más concurrida y conocida de esta lista al ser una de las más vírgenes, grandes y accesibles de la isla. Pero sin ninguna duda su fama reside en su arena blanca y sus aguas azul turquesa, lo que la convierten en una de las playas más atractivas de la zona.
La mayor pega, junto con el precio desorbitado de la bebida y la comida en el único puesto que hay en la playa, es que el parking es de pago (6 € por coche sin importar minutaje, tarifa estándar).
· ¿Cuándo?: En días de sol que no haya un calor excesivo (no hay árboles donde cobijarse a la sombra).
5. Cala Varques
Aunque ya os he hablando de Cala Barques (con “b”), ahora os voy a hablar de Cala Varques (con “v”), o Cala Vaques como la suelen llamar muchos de los que visitan esta playa, ya que suele estar frecuentada por alguna que otra vaca. Por suerte (y digo esto porque sí, me dan miedo las vacas – fail total viviendo en Asturias, lo sé -), cuando fuimos nosotros no nos encontramos con ninguna y pudimos disfrutar de un rato más que agradable.
Para llegar hasta allí hay que ir por la PMV-4014, coger un camino de gravilla (a mano derecha dirección Porto Cristo) y caminar unos 20 minutos desde el “aparcamiento”. Lo pongo entrecomillado porque no hay aparcamiento como tal, sino una larga pista agrícola con el ancho suficiente para aparcar un coche a un lado del camino; así, cuanto más tarde llegues, lo más probable es que aparques más lejos…
· ¿Cuándo?: Si quieres hacer deporte y no te importa ponerte pingando como un pollo de sudor, cualquier día es bueno. Si lo de caminar bajo el sol no te llama demasiado elige un día en el que no pegue demasiado fuerte o no haga mucho calor.
5 + 1. Cala Pi
Cala Pi es una playa bastante pequeña, muy cercana a Palma pero con poco espacio donde poner la toalla (al menos si pretendes tener tus cosas a la vista). La he añadido a la lista, que inicialmente iban a ser sólo las 5 mencionadas hasta ahora, porque creo que fuera de temporada alta, sin turistas ni decenas de niños revoloteando alrededor, tiene que ser una maravilla. Cuando fuimos nosotros estaba nublado y pese a lo gris que estaba el cielo y a que el mar estaba un poco revuelto, tenía un algo especial… quizás el embarcadero ayude a componer esa imagen tan mediterránea.
· ¿Cuándo?: Para tener algo de espacio vital lo ideal es que vayas fuera de temporada de temporada alta, sino tendrás a mucho niños jugueteando cerca (muy muy cerca).
¿Te ha gustado mi selección? Espero poder ampliarla pronto a un Top 10 con playas como Cala Mondragó y Es Caragol, dos de las que nos quedaron pendientes en nuestro pasado viaje.
2 comentarios
Hola Sandra,
Muy buena selección de las mejores calas. La que me gusta particularmente es Cala Pi, tiene un encanto y una luz muy propia que las otras (aunque no las he visto todas^^) no tienen. Mi #2 sería Cala Formentor (llegando en barco desde Pollença es aún más precioso!). Yo añadiría Caló des Moro a la lista, o quizás a un futuro top 10 de las mejores calas de Mallorca! ;)
Un saludo!
Claro que sí! Me encantaría hacer ese Top 10 que dices :D A ver si puedo volver pronto por allí y aumentar mi ranking. Cala Pi no la pudimos disfrutar todo lo que nos hubiera gustado porque nuestra visita coincidió con el día que regresábamos a Asturias :( Pero es lo bueno de viajar, que siempre te quedan ganas de volver a ese destino!