Las Cuevas de Andina (también conocidas como As Covas da Andía en la “fala”, el dialecto que se habla en esta parte del Principado), son uno de los secretos mejor guardados del Occidente de Asturias.
Se encuentran en el concejo de El Franco, y se trata de una antigua mina de oro a cielo abierto y de época romana que data de los siglos I-II d.C, un paisaje que fue declarado Monumento Natural en el año 2002.
El complejo tiene una superficie de 11,9 hectáreas cuya propiedad está repartida entre diferentes dueños que permiten que el ayuntamiento de El Franco las explote con fines turísticos.
Se trata de una zona kárstica (roca caliza) que tiene su origen geológico en el período del Cámbrico inferior (hace unos 540 millones de años) y que con el paso del tiempo ha sido devorada por una exuberante vegetación, recuperando así, poco a poco, un aspecto más salvaje.
Esta vegetación ha surgido gracias al microclima del que actualmente disfruta este valle, con temperaturas constantes durante todo el año (18º más o menos creo recordar) y bastante humedad.
De esta forma ha sido posible el desarrollo de una flora muy variada, surgiendo bosques de gran riqueza compuestos por robles, laureles, madroños, tejos, acebos y helechos entre otras especies.
En las Cuevas de Andina, además de cuevas que adquieren tonalidades muy llamativas (como la cova das grallas), podemos encontrar diferentes pozos, como el de agua verde (llamado así por el color que toma al reflejarse la luz del sol), grietas profundas y formas curiosas excavadas en la roca, como la “calavera” que puedes intuir en la última foto de este post.
La mayoría de estas formaciones se crearon por la acción del hombre, ya que para erosionar la montaña utilizaban una técnica que consistía en aplicar fuego a la roca y después agua fría, lo que hacía que ésta se rompiese.
Durante el recorrido de una hora y media más o menos, la guía (solo se puede acceder mediante visitas guiadas) explica de manera amena y entretenida todo lo que hay que saber del lugar: quién lo trabajó, cómo se formó, por qué, qué especies de fauna y flora habitan hoy el entorno…
No se hace para nada pesado, incluso en una de mis visitas había niños y parecía que se estaban divirtiendo bastante. De hecho, debido a su estatura, ellos pudieron entrar en algunas cuevas a las que al resto nos fue imposible acceder, ¡así que ni tan mal!
¿Qué hay que saber antes de visitar las Cuevas de Andina?
Como he comentado antes, solo se puede acceder gracias a las visitas guiadas para las que se puede reservar plaza a través del teléfono 619 368 169.
El precio de la entrada general es de 3 €, los niños hasta los 15 años y los adultos desde los 65 pagan 2,5 €, mientras que los menores de 5 años entran gratis.
El horario de visitas del 1 de julio al 30 de septiembre es, de martes a domingo a las 11:00, 12:30, 16:00 y 17:30 (lunes cerrado). En cambio, del 1 de octubre al 30 de junio, solo hay visitas los sábados, domingos y festivos a las 12:00 y a las 16:00 (de lunes a viernes no festivos está cerrado).
Es importantísimo saber que pese a que el recorrido está bastante acondicionado, hay partes que es simplemente un sendero de tierra y otras que hay que pisar sobre la piedra y ésta puede resbalar.
Por eso y por la pendiente que hay que salvar en ciertos puntos no es posible acceder con sillas de niños y es desaconsejable que acceda gente con problemas de movilidad.
⇒ Es imprescindible acudir con ropa y calzado adecuados, a ser posible playeros de monte.
Cómo llegar a las Cuevas de Andina
Las Cuevas de Andina están a 8 kilómetros de La Caridad, la capital del concejo.
Desde allí, en la N-634 debes coger el cruce señalizado a las cuevas que te llevará por la FR-1 hasta Arancedo (6 km) y allí desviarte por la FR-6 y conducir durante 2 kilómetros más hasta el parking (verás que también hay un merendero).
⇒ Más información en este enlace de la página web del Ayuntamiento de El Franco.
5 comentarios
¡Precioso! Me encantan estos rincones de Asturias. Cuando estuvimos haciendo la ruta por allí lo que más nos gustaron fueron este tipo de sitios, los “monumentos naturales”. La lastima (o lo bueno) es que necesitas muchos viajes para ver los más importantes. Para la próxima tengo como pendientes Somiedo y ahora las Cuevas de Andina ;-)
¡Muy buenas las fotos!
Yo que me pensaba que conocía Asturias y no había oído hablar de esta maravilla! Las fotos son preciosas, sin duda me lo apunto para cuando vuelva.
¡Un saludo!
Eva
¡Espectacular! Estos bosques tan frondoso tienen algo mágico que te atrapa. Tiene una pinta estupenda :-)
Un abrazo
Me encanta tanto verde!! Parece toda una aventura es precioso!! Prometo pasarme cuando vaya a Asturias. Brutales las cuevas! Ayyy qué ganas de volver a Spain!!
Estuvimos cerca y nos quedamos con las ganas de visitar las Cuevas de Andina. Me ha encantado el recorrido y la próxima vez que vaya por esta zona no dudaré visitarlas.