La falta de tiempo es, junto con el dinero, el gran obstáculo que se interpone en el camino de la mayoría de las personas a las que nos gusta viajar. Resulta difícil plantearse viajes de duración media (una o dos semanas aproximadamente) tan a menudo como nos gustaría y casi siempre nos tenemos que conformar con pequeñas escapadas de fin de semana.
Afortunadamente, en Europa hay muchos destinos que se ajustan a esos requisitos o limitaciones de distancia, tiempo y precio que nos planteamos, y uno de ellos es la ciudad italiana de Milán.
Milán tiene alrededor de 1.500.000 habitantes y se encuentra al norte de Italia, en la región de Lombardía, muy cerca de los Alpes y de la frontera con Suiza. A escasos kilómetros de lugares tan espectaculares y bucólicos como el lago di Como (un lugar perfecto para una escapada de un día desde Milán).
La ciudad cuenta con dos aeropuertos, Milán Malpensa y el aeropuerto internacional Enrico Forlanini (más conocido como Milán Linate), aunque para llegar hasta allí también existe la posibilidad de volar al cercano aeropuerto de Bérgamo, a donde operan aerolíneas de bajo coste como Ryanair.
El vuelo desde España dura entre dos horas y dos horas y media, la duración perfecta para escaparse y conocer la ciudad en apenas dos días.
Al principio la ciudad puede parecer demasiado gris y fría, sin embargo y aunque no se parece en nada a la zona sur del país, que es más cálida, sorprende el ambiente animado que se respira al recorrer sus calles. Al fin y al cabo, no nos podemos olvidar de que estamos en la capital mundial de la moda.
Otro punto a favor para elegir Milán como destino para una pequeña escapada es que prácticamente no tendrás que utilizar el transporte público para nada, ya que el casco antiguo y los lugares de interés se pueden recorrer perfectamente a pie o, llegado el caso, en sus carismáticos tranvías (aunque la red de metro es bastante buena también).
1. Piazza dei Duomo
La Plaza del Duomo es el centro neurálgico de la ciudad, está llena de vida y hay un trasiego constante de gente. Además del Duomo, la catedral de la ciudad que es a su vez el icono de la misma y la estatua ecuestre de Vittorio Emanuele II, allí también se encuentra una de las entradas a las famosísimas y carísimas Galerías Vittorio Emanuele II.
Si te apetece, también te puedes acercar hasta el cercano Palacio Real, que hoy en día alberga diversas exposiciones.
2. Duomo di Milano
El Duomo, un ejemplo fantástico del arte gótico italiano, es la cuarta catedral más grande del mundo (después de la de Sevilla, St.Paul en Londres y San Pedro en el Vaticano) y una auténtica maravilla.
Además de visitar el interior de la catedral, no puedes irte sin subir a los tejados, a los que se accede por una puerta que hay en la parte trasera de la catedral. La subida se puede realizar en ascensor o a pie.
Elijas la opción que elijas, la experiencia de caminar por la azoteas es inmejorable y quizás sea una de las mejores visitas que se pueden hacer en todo Milán.
Una vez arriba, podrás contemplar muy de cerca los imponentes pináculos y su querida y (a)dorada Madonnina, una pequeña estatua de la Virgen María que data de finales el s.XVIII y que preside el Duomo desde su punto más alto (108 metros).
Como curiosidad, ningún edificio de la capital podía superar la altura que alcanza la Madonnina, algo que se pasaron un poco por el forro los arquitectos del edificio Pirelli y del Palacio Lombardía, quienes para no contradecir esa “ley” pusieron una réplica de la Madonnina en lo alto de cada uno de los dos edificios (ya se sabe que “hecha la ley, hecha la trampa…”)
3. Galería Vittorio Emanuele II
El lujo y la elegancia son los dos principales protagonistas en la preciosa Galería Vittorio Emanuele II, que se encuentra repletas de tiendas prohibitivas como Chanel o Louis Vuitton (por poner algún ejemplo).
Es un lugar magnífico para pasear (sobre todo para cobijarse del frío invierno milanés) y soñar por un rato, o incluso para darte algún capricho si es que te lo puedes permitir.
Nuestro pequeño lujo consistió en un simple y carísimo capuccino en una de sus cafeterías y en un agradable paseo mientras contemplábamos alucinados los colores de las paredes (predominantemente dorados) y las cristaleras de los techos.
4. Teatro alla Scala
El Teatro de la Scala de Milán es uno de los teatros más importantes del mundo, siendo uno de los más codiciados sobre todo por los cantantes de ópera. Data de 1778 y ha sido testigo de la presentación de algunas de las óperas más famosas por parte de directores tan importantes como Rossini, Verdi o Puccini.
Si no quieres gastarte todo tu sueldo en una entrada para ver una ópera, siempre puedes visitar su museo, desde donde se puede ver también el opulento interior del teatro.
5. Pinacoteca di Brera
La Pinacoteca di Brera es un museo de arte ubicado en el delicado Palacio di Brera y alberga una de las mejores y más importantes colecciones pictóricas del mundo, con obras de pintores mundialmente reconocidos como Tiziano, Bramante, Rafael, Tintoretto, El Greco, Rubens, Caravaggio, Rembrandt o Modigliani.
Cerca de allí también puedes visitar la Pinacoteca Ambrosiana, otro museo con una colección de obras muy interesante, como la Adoración de los Magos de Tiziano o el Retrato de un músico de Leonardo da Vinci.
6. Cimitero Monumentale
Si eres lector habitual de este blog ya sabrás cuantísimo me gustan los cementerios. Me parece que sin pretenderlo representan muy bien la parte más oculta de los lugares donde se encuentran y de la gente que en ellos habitó y habita.
Una parte que no se puede descubrir de otra forma que no sea paseando por sus caminos, leyendo algunas de sus lápidas y admirando la arquitectura de cada tumba.
Desafortunadamente el Cementerio Monumental de Milán no nos dió tiempo a visitarlo, pero estoy segura de que es una verdadera maravilla. Es imponente y majestuoso, sus esculturas desprenden paz, pero una paz que surge del misterio y del desasosiego.
7. Castello Sforzesco y Parco Sempione
El origen del Castello Sforzesco se remonta al año 1360, pero la edificación que podemos ver hoy en día no es la original ya que a mediados del siglo XV, al proclamarse la república, fue demolido por los habitantes de Milán para reconstruir las murallas de la ciudad.
Sin embargo, pocos años tardaría en reconstruirse bajo las órdenes del general Francesco Sforza. Desde ese momento el castillo aguantó carros y carretas hasta la llegada de Napoleón, quien lo convirtió en un fortín militar. No fue hasta finales del siglo XVIII cuando se reconstruyó y por fin recuperó su uso público y cultural.
Hoy en día, el castillo alberga varios museos de arte, alguno con obras tan representativas como puede ser la inacabada Pietà Rondanini de Miguel Ángel, la que se cree fue la obra a la que el artista dedicó sus últimos días.
Justo detrás del castillo se encuentra el Parco Sempione, el pulmón verde de la ciudad de Milán, donde, si hace buen tiempo, puedes aprovechar para hacer un picnic al aire libre o simplemente descansar un rato.
8. Santa Maria delle Grazie
La basílica (y convento) de Santa María delle Grazie es uno de los lugares más impresionantes y asombrosos de Milán e Italia.
Esta iglesia es mundialmente conocida por albergar, dentro del conocido como Cenacolo Vinciano, la obra más famosa del polifacético Leonardo da Vinci, La Última Cena (1498).
Mucha gente desconoce que no se trata de un cuadro, sino de un imponente mural que ocupa, en su totalidad, una de las paredes del refectorio.
Se pueden hacer visitas guiadas en inglés e italiano, sin embargo, también es posible acceder “por libre” con audioguía. Entrecomillo esto porque las visitas están controladas en todo momento y existe un cupo de personas por hora. Triste y lógicamente, lo de las fotos en el interior del refectorio está totalmente prohibido.
9. Navigli
Los Navigli son un conjunto de pequeños canales que se encuentran al suroeste de la ciudad y a cuyas márgenes se concentran gran cantidad de restaurantes y pubs. Es una zona muy animada y perfecta para disfrutar de unas cervezas al atardecer o picar algo.
Si tienes tiempo, puedes acercarte hasta la Porta Ticinese, una de las once puertas que tenía antiguamente la ciudad de Milán y que además está muy cerca de la Basílica y las columnas de San Lorenzo.
10. Estadio Giuseppe Meazza / San Siro
Si te gusta el fútbol seguro que también te encanta visitar los principales estadios de las ciudades a las que viajas. En el caso de Milán la cosa es mucho más curiosa y delicada que en la mayoría de lugares en los que hayas estado o vayas a estar nunca.
El dato es que el estadio, con capacidad para 81.000 espectadores, es compartido por los dos principales equipos de la ciudad, el AC Milan y el FC Internazionale Milano.
Por eso, cuando juegan los primeros se utiliza el nombre de San Siro para referirse al estadio y cuando lo hace el Internazionale, se utiliza el nombre de Giuseppe Meazza, aunque el oficial es el segundo.
La única pega es que está bastante alejado del centro, por lo que si quieres visitarlo tendrás que ir expresamente hasta allí.
5 comentarios
La entrada a el museo y tour del estadio no es gratis con la Milano card, tines un descuento. Rectifícalo.
¡Hola Jose Juan! Tienes toda la razón del mundo, dicho y hecho, ya está rectificado :) Gracias por la información.
Hola Sandra! Aqui Tom y Angie de Mi vida en un Bowl! Milan es una de nuestra dos casas ya que Tom es originario de alli. Nos encanto que hablaras de Milan, es una ciudad que se esconde un poco pero en los interiores es una autentica maravilla, sobretodo las iglesias son maravillosas! La proxima vez que vengas te llevaremos a conocer muchisimos sitios mas, nos encantó que hablaras dell Cimitero Monumentale, para nosotros es uno de los lugares mas magico de la ciudad: salen foto preciosas! Cuando estamos allí nos perdimos en las tropocientas iglesias de la ciudad, nuestras favoritas son San Lorenzo, antiquisima, del IV siglo! Sant’Ambrogio y sant’Eustorgio son unas joyas del romanico, San Satiro de Bramante y su trampantojo es una maravilla renacentista, Los frescos de la Certosa de Garegnano y de Sant’Antonio abate son un triunfo del barroco, pero nuestra preferida es San Maurizio y sus frescos, de escuela leonardesca…pero para eso hay que quedarse unos cuantos dias mas, asi que te esperamos, a lo mejor para la exposicion universal de Milan 2015! La verdad que nos encanto tu mirada lejana de los estereotipos! Gracias! Un besito desde Tom y Angie! :)
No tengo perdón, soy una tardona contestando comentarios, ¡mil perdones! :S Me encanta que os haya gustado el post, vuestra opinión cuenta mucho siendo 50% de allí :D Ojalá tenga oportunidad de volver pronto por Milán y conocer muchos más sitios, sobre todo esos que me recomendáis. ¡Un abrazo muy fuerte!